¿Los alimentos deshidratados conservan sus nutrientes?

Aunque se trate de una técnica que lleva utilizándose muchos años e incluso siglos, son muchas las dudas que surgen sobre los alimentos deshidratados, principalmente relacionadas con la conservación de sus nutrientes. Para que puedas tener todos los detalles de los procesos que se siguen al deshidratar un alimento, te hemos elaborado este artículo en el que vas a poder encontrar todo lo que necesitas saber sobre esta cuestión, respondiéndote a ella pero además, comentándote todas sus ventajas y beneficios para tu alimentación.

¿Cuáles son los beneficios de los alimentos deshidratados?

Una de las creencias más habituales cuando se habla de la deshidratación de los alimentos, es que estos, al realizar este proceso, pierden por el camino gran cantidad de nutrientes que no podremos recuperar de ninguna de las maneras. Pensar en esto es un error que suele extenderse rápidamente y que suele ser ocasionado principalmente por la desinformación.

Para que se pueda tener algo de conocimiento e historia, la deshidratación de alimentos es un proceso que lleva realizándose incluso en la Prehistoria, en la que muchas tribus y clanes utilizaban el proceso de secado al Sol de carnes, verduras o pescados para que de esta manera pudiera conservarse durante más tiempo. Cuando un alimento se secaba, era menor el riesgo de que las bacterias se reprodujesen en su interior, por lo que conseguían estar más tiempo en buen estado. El proceso por el que los primitivos realizaban el secado o deshidratado de los alimentos ha ido evolucionando con el paso de los años, cambiando drásticamente hasta nuestros días en los que existen aparatos electrodomésticos que realizan este proceso de una manera sencilla en tu propia casa, aunque también en ciertos sectores y regiones del mundo de siguen utilizando las técnicas ancestrales para este tipo de secados.

Larga conservación de los alimentos

Para aquellos que no lo sepan, la conservación de los alimentos deshidratados puede durar de meses a años, incluyendo en este caso desde carnes a pescados. Una premisa para que esto se realice de manera correcta es que en todo momento el envase en el que se vayan a guardar esté al vacío, como también que se retire la mayor cantidad de agua posible para que de esta manera no pueda provocar que los alimentos terminen caducando. Además de que los alimentos van a tener una fecha de caducidad mucho mayor de lo habitual, también se puede realizar con todo tipo de comidas. En la actualidad es posible encontrarse desde con frutas y verduras deshidratadas como también alimentos de origen animal o para otros usos como bien puede ser el secado de flores para que conserven su aroma o fermentar con más rapidez el pan.

Mantienen en perfecto estado sus propiedades nutricionales

El proceso que se realiza con los deshidratadores de alimentos es bastante sencillo, consiguiendo que el agua que tiene en su interior se evapore para que de esta manera la comida se vaya deshidratando. En este proceso lo único que va a perder es el agua y por lo tanto, todos y cada uno de sus nutrientes están en perfecto estado, sin modificarse ni reducirse, lo único que no van a aportar a tu organismo es líquidos.

Beneficios de deshidratar los alimentos

Mejora el sabor de los alimentos

Una de las razones por las que muchas personas desean deshidratar sus alimentos es precisamente porque consiguen que sepan mucho más. Esto es debido a que el agua suele expandir las partículas y al retirar, todo se concentra en un mismo lugar, por lo que un bocado a una naranja que ha sido cortada al natural y una que ha sido deshidratada van a tener intensidades diferentes, siendo más potente el producto que ha sido secado. Es por esta razón por la que podemos encontrar en muchos comercios de alimentación frutas deshidratadas, ya que cuentan con un sabor mucho más fuerte y al conservar la fructosa, saben más dulce, aunque no quiere decir que han sido tratados para que tengan dicho sabor.

Ocupan menos espacio

Los agricultores o personas que trabajan en su propio campo con cosechas de tomates, entre otras hortalizas o frutas, en ocasiones deciden deshidratar los excedentes para que se pueda aprovechar lo que ha sobrado, pudiendo o bien conservarlos para la época en la que no se produce o para venderlo. Poder vender frutas y verduras de temporada viene muy bien, pero cuando estas no se consiguen vender al completo y no se quiere perder dinero con la cosecha, la deshidratación de alimentos es perfecta para que pueda tenerse durante meses o incluso años almacenándose y al ocupar mucho menos espacio, pueden ser guardados más cómodamente y sin riesgos de que se pudra.

Evita el picoteo de alimentos no saludables

Al conservar los nutrientes en perfecto estado los alimentos deshidratados, pueden considerarse como un snack muy útil para cuando se tiene hambre. Al ocupar muy poco espacio, pueden caber en cualquier mochila o bolsillo, llevándose en una pequeña bolsita de plástico y sin tener que preocuparte si se van a estropear, ya que a diferencia de otros aperitivos no se podrá feo ni con un gusto malo, sino que directamente podrás degustarlo en el metro cuando vuelves a casa, entre horas en la Universidad o incluso cuando estás viendo la televisión, siendo un aperitivo que contiene una gran cantidad de vitaminas y minerales que ayudarán a que tengas más energías y que puedas comer frutas y verduras de una manera diferente.