Bebidas

Propiedades de la manzanilla

La manzanilla es una de las infusiones más populares en todo el planeta. Conocida por sus beneficios para nuestro estómago y para aliviar el estrés, esta planta silvestre cuenta con una gran cantidad de propiedades. Y es que la manzanilla, también conocida como camomila, es un remedio natural que comenzó a utilizarse hace miles de años. De hecho, en el antiguo Egipto ya era utilizada y era considerada un remedio para cualquier enfermedad. Se dice que la mejor manzanilla del mundo proviene del Rio Nilo.

En cuanto a la composición nutricional de esta planta, nos encontramos que esta cuenta con camazuleno, ácido tíglico, ácido antémico, atesterol, atemena y taninos, así como varios sesquiterpenos.

A continuación, te explicamos cuáles son las principales ventajas de consumir esta planta ancestral, así como las posibles contraindicaciones y en qué casos no debe ser consumida. ¡Comenzamos!

Beneficios de la manzanilla

Digestiva: Desde siempre, la manzanilla ha sido considerada la planta digestiva por excelencia. Esto es debido a sus aceites esenciales que le confieren estas propiedades, por lo que resulta estupenda para ingerir tras las comidas. Además, su uso está recomendado también para aliviar las úlceras gástricas, así como para prevenir el reflujo o la acidez estomacal.

Relajante: Otra de las propiedades más destacadas de la manzanilla es su efecto relajante. Y es que esta planta tiene un efecto sedante sobre el sistema nervioso. Esto lo consigue aumentando los niveles de serotonina y melatonina en el cuerpo, gracias a los cuales se puede reducir el estrés y los síntomas de la ansiedad. Su uso está aconsejado, pues, para ayudar a conciliar el sueño, así como para aliviar los picores en los ojos ocasionados por alergias o cansancio. En ese caso hay que poner la planta en infusión y colocar el sobre encima de los ojos para reducir la hinchazón y el picor en los ojos. 

Alivia los gases: Debido a que se trata de una planta que se utiliza por su efecto digestivo, la manzanilla es de gran utilidad para reducir los gases ocasionados por una comida pesada o cualquier alimento responsable de la aparición de los mismos. En ese caso, una infusión de manzanilla por la tarde resultará de gran ayuda. El efecto de esta planta sobre el aparato digestivo es carminativo, es decir, relaja los músculos estomacales lisos.

Mejora la salud del cabello: La aplicación de manzanilla en el cabello —en forma de lavado— sirve para eliminar la caspa y para dejar un pelo más limpio y brillante. De hecho, muchas de las cosméticas utilizan esta planta para sus champús, así como para sus geles. En este caso aprovecha, también, sus propiedades relajantes —ya mencionadas—.

Mejora la circulación: La manzanilla tiene otro efecto que resulta muy relevante. Este consiste en su acción vasodilatadora. Y es que la manzanilla actúa mejorando la circulación de la sangre gracias a la relajación de los músculos que controlan el tono muscular de los vasos sanguíneos. De esta forma lo que se consigue es incrementar el flujo sanguíneo y que la sangre circule sin obstrucciones.

Contraindicaciones de la manzanilla

Como en todo, los excesos siempre resultan perjudiciales. Así mismo, la manzanilla no debe ser consumida por las mujeres durante el embarazo ya que se ha comprobado que puede provocar un efecto contrario a su función principal relajante y ocasionar la contracción uterina e, incluso, el aborto.

Así mismo, se ha comprobado que la manzanilla puede provocar alergias en el contacto con la piel de algunas personas —sobre todo en el caso de personas con pieles sensibles— e, incluso, problemas de respiración en el caso de las personas alérgicas que han ingerido su infusión. Se habla en algunos casos, incluso, de shocks anafilácticos.